 Foto: Archivo, ABN. |
Con una inversión de más de 420 millones de dólares y gracias a los diversos convenios que actualmente sostiene Venezuela con China en diversas áreas, fue posible construir toda una plataforma tecnológica que tiene por objetivo subsanar las deficiencias comunicacionales que existen en poblaciones rurales que fueron olvidadas por gobiernos anteriores al revolucionario.
La plataforma satelital está compuesta por acuerdos de transferencia tecnológica, edificación de subestaciones eléctricas, bases de control terrestres y capacitación de talento humano en China, lo que evidencia la magnitud del compromiso del Gobierno Revolucionario en ofrecer a los venezolanos una herramienta completa y funcional al servicio de todos los ciudadanos.
Actualmente, el Simón Bolívar presta servicios para las transmisiones oficiales conjuntas de radio y televisión, programas con participación de comunidades, conexiones de infocentros y Centros Bolivarianos de Informática y Telemática (Cbit), así como servicios de medicina y educación a distancia (telemedicina y teleeducación), principalmente en poblaciones lejanas.
La calidad y técnica con la que el personal venezolano ha manejado el Satélite Simón Bolívar ha sido de suma eficacia, al punto de que la vida útil de la plataforma, que en principio estaba estimada en unos 15 años, se extendió a 16, 25 años, gracias al ahorro de energía por parte de los técnicos de la Agencia Bolivariana para Actividades Espaciales (Abae) y la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (Cantv) en sus maniobras de operación.
Venezuela es el único país en América Latina con un satélite con banda ancha, el Simón Bolívar tiene una característica que lo diferencia de la mayoría de los satélites del mundo y de todos los que orbitan en Latinoamérica, y es que tiene una aplicación social y no comercial.
El satélite cuenta con una antena en banda KA, que cuenta con tecnología de punta ya que permite la transmisión de datos a una velocidad mucho mayor que el resto de las antenas y sin escalas o interferencias.
La banda ancha del Simón Bolívar beneficiará a los habitantes de las zonas remotas del territorio nacional, por lo que se espera desarrollar todo un conjunto de aplicaciones para ampliar la tecnología de banda ancha.
Para ello se firmó un acuerdo con la Universidad Estatal Bielorrusa de Radiolectrónica e Informática, con el propósito de crear un software que Venezuela adoptaría y utilizaría para aprovechar las capacidades del Venesat-1 en ancho de banda, lo que haría a Venezuela pionera en desarrollo de este tipo de tecnología.
Herramienta para la integración
La señal del satélite venezolano abarca todo el territorio nacional sin excepciones, pero su potencia también permite cubrir buena parte de Latinoamérica y El Caribe, razón por la que el Simón Bolívar representa también un instrumento de envergadura para facilitar la unión de los pueblos.
Muestra de ello se refleja en las cinco antenas satelitales que envió el Gobierno de Venezuela a la República de Haití para prestar apoyo en las telecomunicaciones de la isla, afectada por un sismo de magnitud 7.1 a principios de año, el cual dejó terriblemente afectada a la población.
El satélite de uso social coloca a Venezuela en la vanguardia tecnológica de América Latina y el Caribe, gracias a que permite desarrollar diferentes proyectos sociales dirigidos a solucionar problemas puntuales del pueblo venezolano, así como de los diferentes pueblos hermanos latinoamericanos y caribeños.
Las políticas sociales del gobierno revolucionario hicieron posible que el Simón Bolívar fuera destinado a satisfacer las necesidades de la población venezolana; además de ser un satélite con potentes capacidades, es único en su clase porque está destinado al beneficio de todos los venezolanos y no para fines comerciales o económicos.
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